Criptococosis mucocutánea
del plano nasal en un perro: reporte de caso
Mucocutaneous cryptococcosis of
nasal planum in a dog: a
case report
Luis Mario Leyva-Zapata,
José Luis Palomares-Rangel, Ana Cecilia Guevara-Mata,
Elva Karina
Calvillo-Huereca, Verónica Carvajal-de la Fuente*
Autor para correspondencia: vcarvajal@docentes.uat.edu.mx Fecha de recepción: 29 de junio de 2023
Fecha de aceptación: 13 de julio de 2023 Fecha de publicación: 11 de agosto de
2023
Facultad de Medicina Veterinaria y
Zootecnia, Universidad Autónoma de Tamaulipas. Ciudad Victoria, Tamaulipas,
México.
Resumen
Se presenta caso de
paciente canino mestizo macho de 5 años con historia de deformidad facial por
abultamiento en plano nasal con diagnóstico presuntivo de neoplasia intranasal.
Se solicitó biopsia incisional para estudio
histopatológico que reveló dermatitis piogranulomatosa
severa zonalmente extensiva con presencia de estructuras levaduriformes
encapsuladas compatibles con Cryptococcus sp. Se realizó cultivo micológico donde se aisló Cryptococcus sp. La terapia con fluconazol por 65 días resultó
efectiva con resolución de signos clínicos. El paciente ha permanecido
asintomático durante más de un año después de haber finalizado la terapia. De
acuerdo con la literatura revisada, este es el primer caso de criptococosis
reportado en un perro del estado de Tamaulipas, México.
Palabras clave: criptococosis, plano nasal, perro, diagnóstico,
pronóstico.
Abstract
A
5-year-old male mongrel dog was presented for a history of facial deformity due
to nasal plane bulging with a presumptive diagnosis of intranasal neoplasia. An
incisional biopsy of the lesion was performed. Histopathology findings showed a
severe zonally extensive pyogranulomatous dermatitis with many yeast-like
encapsulated organisms, compatible with Cryptococcus sp.
Mycological culture was performed where Cryptococcus sp. was isolated. After 65 days of fluconazole treatment showed
complete disappearance of the nasal lesions. The patient has remained
asymptomatic for more than a year after the completion of therapy. According to
the literature reviewed, this is the first reported case of cryptococcosis in a
dog from Tamaulipas State, Mexico.
Keywords: cryptococcosis, nasal planum, dog,
diagnosis, prognosis.
Introducción
La criptococosis es una de las infecciones fúngicas sistémicas de
mayor relevancia que afecta a una amplia gama de especies animales incluyendo
perros, gatos y humanos (Rajasingham et al., 2017).
La enfermedad es producida por el hongo levaduriforme Cryptococcus
neoformans, sin embargo, Cryptococcus
gattii se ha aislado, aunque con menor frecuencia
(McVey et al., 2022). La criptococosis se ha
reportado a nivel mundial como una de las principales causas de muerte
asociadas al Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) con un millón de
personas afectadas anualmente (Soares et al., 2019). En México, desde hace casi una década, se ha
estimado que en el 10% de las personas con meningoencefalitis, se ha aislado
este hongo, y el 28% de estos casos, están infectados con el virus VIH
(López-Martínez et al., 2014).
Existe escasa información sobre estudios epidemiológicos de
Criptococosis en animales en nuestro país. Este hongo saprófito oportunista se
puede encontrar con frecuencia en lugares donde hay heces de palomas y materia
orgánica en degradación ya que se ha demostrado que las altas concentraciones
de urea, creatinina y otros compuestos nitrogenados que contiene las excretas
de éstas y otras aves, propician un ambiente idóneo para el crecimiento de la
levadura (Coelho & Farrer, 2020; Rosario et al.,
2008).
En las últimas décadas, los casos de criptococosis en medicina humana
y veterinaria se han incrementado considerablemente sobre todo en aquellos
individuos inmunocomprometidos, que sufren alguna condición debilitante o los
que se encuentran bajo tratamientos con terapias de esteroides por largos periodos
de tiempo (Rajasingham et al., 2017).
La infección inicia como una enfermedad respiratoria crónica debido a
su vía de entrada aérea, y posteriormente se disemina hacia la piel y órganos
internos con especial tropismo hacia el sistema nervioso central donde se
desarrollarán nódulos granulomatosos (Maxie, 2015; McVey et al., 2022; Zachary, 2017).
El diagnóstico de la enfermedad se realiza mediante la observación
microscópica directa de las levaduras en muestras citológicas e
histopatológicas teñidas con Hematoxilina y Eosina (H&E). No obstante,
estas técnicas tienen limitantes ya que en ocasiones la cápsula de las
levaduras es difícil de observar debido a que es altamente hidrofílica
llegándose a confundir fácilmente con otro tipo de levaduras.
El Ácido Peryódico de Schiff
(PAS, por sus siglas en inglés), Grocott y Mucicarmín de Mayer se usan como tinciones alternativas
para observar con mejor claridad a este patógeno (Zachary, 2017). El cultivo y aislamiento de la levadura se
considera como el método de diagnóstico microbiológico de referencia
(sensibilidad de 90%) en el cual se realiza a partir de distintos fluidos,
secreciones o tejidos afectados (Arias & Montero, 2011).
El agar Sabouraud sin cicloheximida es el
medio más utilizado en donde después de incubarse 48-72 h crecerá la levadura
formando colonias mucosas de color blanco cremosa (Castellá et al., 2008). Para el tratamiento de la criptococosis se
emplean azoles, como el fluconazol y el itraconazol (McVey et al., 2022; O’Brien et al., 2006).
Descripción del caso clínico
En una clínica veterinaria particular del Municipio de Río Bravo,
Tamaulipas, se llevó a consulta, un canino macho de raza mestiza de 5 años que
mostraba deformidad facial debido al abultamiento localizado en el plano nasal
con evolución de aproximadamente dos años. El diagnóstico clínico presuntivo
realizado por un veterinario fue una neoplasia nasal. El perro vivía dentro de
casa y no tenía antecedentes de haber viajado fuera de la región geográfica
antes mencionada. Al examen físico general, el paciente estaba alerta y
responsivo sin presencia de fiebre (temperatura corporal de 37.5 °C) y
condición corporal de 3/5. Presentaba estornudos y descarga mucopurulenta que
provenía de ambas fosas nasales. Además del abultamiento en el plano nasal, se
pudo observar descamación en la trufa con lesiones costrosas y ulceradas
profundas (Figura 1). Como plan
diagnóstico inicial se colectaron muestras sanguíneas para hemograma y
bioquímica sanguínea, junto con tres muestras de biopsias incisionales
de la piel del plano nasal de aproximadamente 0.6 cm de diámetro las cuales
fueron fijadas con formol buferado al 10% durante 24
h. Posteriormente, se realizaron cortes histológicos de 5 μm
de grosor y fueron teñidos con H&E.
Resultados
Hemograma y química sanguínea
Los resultados del hemograma revelaron una anemia
leve normocítica normocrómica no regenerativa y ligera leucocitosis con
moderada desviación a la izquierda compatible con un proceso inflamatorio
(Tabla 1). En la bioquímica sanguínea se encontró hipoglucemia, hiperglobulinemia leve, así como un ligero incremento de
las enzimas hepatobiliares ALP, ALT y DHL (Tabla 2).
Histopatología
El estudio histopatológico reveló una dermatitis piogranulomatosa
severa zonalmente extensiva con la presencia de abundantes estructuras
levaduriformes intralesionales de formas redondeadas,
con presencia de un halo transparente a su alrededor de 15 a 20 micrómetros de
diámetro compatibles con Cryptococcus sp. (Figura 2A). En base a estos resultados se
realizaron tinciones complementarias para evidenciar mejor la presencia de
estructuras micóticas.
Las levaduras intralesionales resultaron
positivas a la tinción de PAS (Figura 2B) y Grocott
(Figura 2C). Además, se utilizó la tinción de tinta china (tinción negativa)
cuyo objetivo es teñir la preparación excepto la cápsula de la levadura (Figura
2C).
Cultivo
Para establecer el diagnóstico definitivo del agente etiológico, se
realizó cultivo micológico a partir de muestras de hisopados del exudado nasal.
Para este fin se utilizaron tres medios de cultivo, los cuales fueron: agar
sangre, dextrosa papa y agar Sabouraud. El cultivo fue incubado a una temperatura
de 30 ºC durante 72 h, después de este tiempo
aparecieron colonias redondas, convexas, con bordes lisos, de color café o
crema brillante sugerente de un agente levaduriforme (Figura 2D). Después del
crecimiento de la colonia, se tomó una sección de ella para la caracterización
morfológica del agente con tinta china, en la cual se observaron las
estructuras compatibles con Cryptococcus sp. (Figura 2C) (McVey et al.,
2022).
Tratamiento
En base al diagnóstico se inició terapia antifúngica oral con
fluconazol a 5 mg/kg BID
(Bis in Die por sus siglas en inglés o dos veces al día) por 65
días sin presentar complicaciones secundarias al medicamento o al cuadro
infeccioso. El paciente permaneció asintomático durante más de un año después
de haber finalizado la terapia.
Discusión
La criptococosis ha sido reportada en una gran variedad de animales
domésticos y en contraste con otras micosis profundas, es más frecuente
observarla en el gato que en el perro (Castellá et al., 2008). La vía de
infección más frecuente es la aérea, afectando inicialmente las vías
respiratorias altas. Aproximadamente un 80% de los gatos afectados manifestarán
rinitis granulomatosa con deformación de la cavidad nasal (Coelho et al.,
2020).
A diferencia de las alteraciones nasales observadas en felinos, se ha
reportado que los perros rara vez presentan esta signología
(Castellá et al., 2008; Pérez et al., 2015). En este caso en particular, el
paciente presentó lesiones similares a las descritas en gatos, como deformidad
del plano nasal con secreción mucopurulenta y dermatitis piogranulomatosa
severa crónica (Candanosa et al., 2015). Sin embargo,
a pesar de que cursó por un cuadro crónico, resultó tener un pronóstico favorable
debido a que la patología fue limitada y tuvo una excelente repuesta al
tratamiento con fluconazol. Por otro
lado, Bowles y Fry en el 2009, reportan el caso de un canino hembra Pointer
Alemán que presentó tumoración del lado izquierdo del rostro con presentación
clínica aguda, seguida de signos respiratorios severos, y al instaurar el
tratamiento con fluconazol, presentó aún mayor deformidad nasal con compromiso
del sistema nervioso central.
En contraste, De Iturriaga y Espejo en 1996, describe el caso de un Cocker Spaniel macho de 6 años,
que presentó estornudos y secreción nasal mucopurulenta durante 3 años sin
respuesta a antibióticos, y subsecuentemente desarrolló tumoración subcutánea
sobre el puente de la nariz, después de confirmar el diagnóstico por
histopatología de criptococosis, fue tratado durante dos meses con ketoconazol
con una evolución satisfactoria.
Se ha reportado que los animales con criptococosis crónica y aquellos
que presentan lesiones en sistema nervioso central o en varios órganos, suelen
tener un pobre desenlace (Vorathavorn et al., 2013).
Por otro lado, otras investigaciones han demostrado que dichas
lesiones no determinan el pronóstico de los pacientes (Pérez et al., 2015). Se
dice que para la resolución completa de la criptococosis no basta con la
desaparición de los signos, sino que es importante también comprobar la
ausencia de títulos contra el hongo en líquido cefalorraquídeo (LCR) para
disminuir la posibilidad de reincidencia, la cual puede ocurrir en meses o años
(Vorathavorn et al., 2013).
Los hallazgos de laboratorio frecuentemente observados en un hemograma
de un perro con criptococosis es una anemia normocítica normocrómica de tipo no
regenerativa, además, en la serie blanca suelen asociarse con una respuesta
inflamación crónica (Stockham & Scott, 2008). Los
cambios anteriormente descritos coinciden con los reportados en este paciente.
No obstante, estas alteraciones no son específicas de criptococosis ya que
éstas pueden observarse en cualquier enfermedad inflamatoria con un curso
crónico dificultando su diagnóstico (Stockham &
Scott, 2008). Otro cambio observado en la sangre de este canino fue un
incremento de las inmunoglobulinas, el cual, en ausencia de deshidratación, se
asoció a un proceso inflamatorio.
Asimismo, se encontró un ligero incremento de las enzimas alanina
aminotransferasa (ALT), deshidrogenasa láctica (DHL) y fosfatasa alcalina (FA)
sugiriendo un daño hepatobiliar; sin embargo, no se realizaron estudios
adicionales para descartar la presencia de alguna lesión en este órgano.
El género Cryptococcus
incluye alrededor de 100 especies, pero sólo Cryptococcus
neoformans (95% de los casos) y Cryptococcus gattii
son de importancia clínica para el humano y el perro (Maziarz
& Perfect, 2016). El interés de identificar hasta
el nivel de especie se basa en el hecho de que C. gattii
provoca infecciones más agresivas que requieren un enfoque terapéutico mucho
más intensivo que las que son provocadas por C. neoformans
(Chen et al., 2014). Las técnicas convencionales para la detección de Cryptococcus sp.
son la histopatología donde utilizan distintas tinciones especiales (PAS, Grocott y Tinta China) que permiten visualizar con mayor
facilidad las levaduras como en este caso (Figura 2).
Además, el diagnóstico definitivo se consigue
mediante el cultivo y aislamiento de las levaduras donde se observan, después
de incubarse, colonias lisas de textura mucoide y coloración blanco
cremosa como las reportadas en este trabajo. Sin embargo, estas técnicas
no permiten diferenciar la especie de Cryptococcus
involucrado ya que, para tal fin, se requieren estudios bioquímicos adicionales
como pruebas de asimilación y utilización de ciertos carbohidratos, así como,
pruebas de asimilación de creatinina y producción de ureasa entre otras (Maziarz & Perfect, 2016).
Por lo anterior, en casos posteriores, se
recomienda utilizar estas pruebas más específicas con el fin de obtener una
precisa identificación del hongo. La
importancia del diagnóstico de la criptococosis reside en la identificación
temprana de los focos de infección a los que están expuestos aquellos
individuos susceptibles con el fin de tomar las medidas adecuadas para evitar
su diseminación y de esta manera salvaguardar la salud de los animales y por
ende la del ser humano.
Conclusiones
Este caso evidencia que la criptococosis en perros puede afectar
principalmente a la cavidad nasal y puede llegar a confundirse fácilmente con
otras patologías que cursen con tumefacción como en el caso de neoplasias. Se
recomienda utilizar pruebas más específicas para poder conocer la especie de Cryptococcus involucrada en casos clínicos futuros.
El diagnóstico temprano permitirá instaurar un tratamiento oportuno y
tener, como en este caso, un mejor pronóstico. Si bien, el riesgo de
desarrollar esta infección micótica es bajo, el reporte de este caso en un
perro en el estado de Tamaulipas debe alertar a los veterinarios en cuanto a la
necesidad de considerarla en la lista de diagnósticos diferenciales en
pacientes con signología similar a la descrita en este
documento.
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